Capítulo 7: Como amigos

Abrí el mensaje de Anna y lo leí: "Sé que hoy me has visto un poco rara... Necesito hablar con alguien."

Me quedé mirando el mensaje unos minutos y lo releí muchas veces. ¿Que significaba eso? Supongo que era una indirecta para quedar y hablar conmigo. Pero... ¿ella no estaba ya en Mollet? Estuve unos minutos más pensando en qué responderle y al final la llamé. Estaba un poco nervioso, casi nunca hablaba con Anna por teléfono pero ahora la veía mal y me necesitaba. A mí o a alguien, según su mensaje, así que decidí hablar con ella por teléfono.

-Hola Dani.-respondió nada más llamarla. Lo cogió enseguida, le noté la voz temblorosa, también estaba nerviosa.

-Annita, ¿Qué pasa? ¿No estás en Mollet?-le pregunté cuidadosamente.

-No... ¿Podemos quedar mañana? Como ya te he dicho, necesito hablar con alguien...-me dijo.

Qué raro... volví a pensar. Normalmente cuando le pasa algo queda con Romina o con alguna otra amiga de Madrid pero, ¿conmigo?

-Sí claro, ¿a las cinco te va bien? Oye pero... ¿estás bien?-le pregunté.

-Me va bien, mañana hablamos. Buenas noches Dani.-me dijo. Y colgó sin darme tiempo a despedirme.

Me quedé unos minutos pensativo mirando el móvil. Anna me daba pena. Ella tenía razón, durante el programa la había visto un poco rara, su actitud no era la que yo esperaba ya que ese día vino su novio al programa y me pareció que no estaba tan ilusionada como el día anterior cuando nos dio la noticia de que vendría. Además creo que ni se había despedido de Miki... Decidí no darle más vueltas, porque tampoco tenía motivos para darme pena, aún no sabía qué le pasaba, pero me moría de ganas por saberlo...

Esperé a que acabase el partido del derbi, que por suerte, ¡ganó el Barcelona 5 a 1!, miré un rato "Punto Pelota" y me fui a la cama. No tenía mucho sueño y me costó dormirme porque aún estaba pensando en Anna, pero ese sábado me tenía que levantar temprano así que me mantuve en la cama hasta que conseguí dormirme.

Como odio madrugar... ¿existe alguna persona que le guste? Porque se merecería un monumento... Me levanté a las siete y me vestí; me puse la camisa negra de cuadros que me gusta tanto y unos tejanos. Desayuné, cogí las llaves del coche y me fui directo al aeropuerto para recoger a mi hermano Nacho que venía a pasar el finde a Madrid en casa de su amigo.

-¡Nachete! ¿Cómo ha ido?-le pregunté cuando ya habíamos subido al coche.

-Bien. Oye, ¿esta tarde me puedes llevar a casa de Juanjo?-me preguntó.

-¿Esta tarde? No puedo, he quedado...-le contesté. Sabía lo que me iba a decir...

-Uh...¿Con quién?-me preguntó con una sonrisa.

-Con Anna, tiene problemas.-le dije seriamente.

-Ya... problemas...-dijo algo incrédulo.-¿Pero Anna no tenía novio?

-Claro que tiene novio, ¿qué tiene que ver eso? ¡Hemos quedado como amigos, tonto!-le contesté enfadado.

Me gustó su reacción al decirle que había quedado con Anna... Al pensarlo aún me río. De todos modos, la intención de Annita era quedar como amigos... ¿no?