divendres, 29 de juliol del 2011

Capítulo 20: Un sueño

Lo juro, ya me encontraba bien. Habíamos empezado el programa y me sentía muy arropado por Anna. En cualquier momento que podía me hacía un gesto de cariño y me sentía muy bien. Al acabar el programa fui a casa. Cogí el móvil para llamar a Lara. Ella era realmente la razón por la cual había tenido dolor de cabeza y necesitaba verla.
Dani!-contestó alegremente.
-Cari, tengo ganas de verte, ¿dónde estás?-pregunté.
-En mi casa, ¿dónde quieres que esté?-me dijo.
-Pues ahora voy para allá.-dije y colgué. Si, necesitaba verla, necesitaba saber que estaba sola y que mi sueño había sido sólo eso, un sueño. Quería hablar con ella y estar seguro de ello. No podía perderla, en ese momento no.
Me cambié de ropa y me fui de camino a su casa. Llegué y al abrirme la puerta la abracé y le di un beso.
-Ui, ¿y este recibimiento?-preguntó ella.
-Pues que te echaba de menos.-le dije.
-Yo también.-me dijo y me abrazó. Ese gesto me tranquilizó. Sabía que sus palabras eran reales y me di cuenta de que había sido muy tonto por preocuparme de esa manera sólo por un sueño.
Entré y nos sentamos en la terraza a tomar un café. Estuvimos hablando y, por suerte, no me dijo nada sobre mi beso con Anna. Se lo agradecí.
-Lara, ayer cuando te llamé...
-De eso quería hablar yo también. Lo siento Dani, de verdad. Se me olvidó por completo que habíamos quedado a esa hora. Es que me llamó mi jefe y me dijo que tenía que ir ya al trabajo para preparar unas cosillas y no pensé más en nuestra "cita".-me dijo.
-Está bien, no pasa nada.-dije y sonreí.
Me quedé a cenar y a dormir. Hacía días que no dormía con ella. Echaba de menos hacer el amor y dormir con alguien a mi lado. Y también lo necesitaba. Necesitaba sentirme querido y deseado por alguien.
Pasaron unas semanas y Lara y yo ya habíamos vuelto a la normalidad. Estábamos bien como antes y yo intentaba no pensar tanto en Anna aunque no sé si lo conseguía. Sabía que nunca tendría ninguna oportunidad de estar con Anna y me tenía que conformar. Iban pasando los programas y volvía a estar cada día más cariñosa conmigo. Cómo me hace sufrir esta mujer... pensé. Yo intentaba juntarme más con Romina y hablar con ella y durante esas semanas nos cogimos más confianza. Ella también me hablaba de sus problemas con su pareja y yo le hablaba de los míos con Lara. Pero nunca le llegué a contar que sentía algo por Anna. No me veía capaz.
Recuerdo que un día Romina me propuso ir a cenar con ella y Anna y luego salir de fiesta. Acepté enseguida. ¡No podía rechazar esa maravillosa oferta!! Pero antes, se lo tenía que comentar a Lara. Estaba muy tranquilo porque Lara y yo habíamos hablado mucho sobre nuestra relación últimamente y nos habíamos dado mucha libertad para salir con quién nos diese la gana. Ella salía con sus amigos y yo con los míos. No había problema. Se lo comenté y estuvo de acuerdo. Aunque pasada esa noche yo deseé que no hubiese estado tan de acuerdo...

3 comentaris:

  1. Si se sabe!!! por favor dime que si se sabe!! ya he vuelto y me encuentro con semejante intriga!? eso no puede ser Maria teresa! ahi queda eso! XD

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