Capítulo 8: Lágrimas y sollozos

Después de salir del aeropuerto, Nacho y yo nos fuimos a comer a un restaurante que hay cerca de mi casa. Estuvimos hablando de la familia un buen rato pero luego saltó:

-Dani, ¿por qué te has puesto de esa manera cuando te he preguntado lo de Anna?-me preguntó. Me quedé helado. No sabía qué responder... No le iba a decir que Anna me gustaba pero creo que ya lo suponía...

-Pues, porque me has puesto nervioso con tanta preguntita... y ahora come y calla.-le respondí.

No me preguntó nada más sobre el tema y por dentro se lo agradecí. Aunque intentara tranquilizarme, sabía que él me notaba nervioso nada más hablar de Anna, al fin y al cabo, es mi hermano y me conoce perfectamente... Pero no quería que supiese lo que sentía por Anna en ese instante.

Cuando acabamos de comer fuimos a casa, ya eran las cuatro de la tarde y a las cinco había quedado con Annita. Nos pusimos a mirar la tele y en media hora recibí un mensaje de Anna: "Quedamos en mi casa ok? No quiero encontrarme a nadie por la calle...". Estuve de acuerdo, tampoco hubiésemos podido quedar en mi casa ya que estaba mi hermano. Pero por la noche ya se iba.

Faltaban diez minutos para las cinco cuando salí de casa. Me había peinado con gomina y me había puesto mi colonia preferida. A las cinco en punto llamé al interfóno de su casa.

-¿Si?-preguntó una voz muy peculiar, la suya.

-Soy yo: Dani.-dije y, seguidamente, me abrió. Subí las escaleras ya que en su bloc no hay ascensor y toqué el timbre algo cansado. En unos segundos abrió la puerta. Llevaba un jersey azul claro a juego con sus ojos y unos tejanos. Aún llevaba el pelo planchado del programa del viernes e iba sin maquillar. Para mí estaba guapísima, como siempre. La miré a los ojos y me abrazó.

-Dani... gracias por venir.-me dijo aún abrazándome.

-Venga no seas tonta, ya sabes que no tienes porque dármelas.-le dije y le dediqué una sonrisa.

Me senté en el sofá y en un minuto vino ella con dos cafés.

-Toma, ¿quieres?-me preguntó.

-Claro.-le dije cogiendo una taza.

Después de sentarse a mi lado me dijo:

-Dani, ya sé que te pareció extraño que te lo dijera a ti y no a Romina o a alguna amiga pero es que no quiero que ellas lo sepan...

-Que va, no te preocupes cuqui ya sabes que me tienes aquí para lo que quieras.-le dije.-¿Y qué es eso que no quieres que sepan?

-Es Miki. Llevamos una semanas... El jueves por la noche vi el último capítulo de su serie por Internet y se besó con otra actriz. Yo no suelo ser muy celosa pero ¡ya es la cuarta vez! Yo lo entiendo perfectamente pero aunque no quiera aceptarlo me molesta. Y no sabes cómo fue el beso... Lo llamé y le dije así en plan broma: "¿Qué quieres, darme celos?". No sabes cómo se puso... se enfadó mucho y me dijo que no se esperaba esto de mi, etc. Por eso, ayer, cuándo él vino en el programa yo intenté darle celos contigo para que supiera cómo me sentí y, ¡se fue sin despedirse de mi! No me lo podía creer Dani...-en ese mismo instante, empezó a llorar.-no fui a Mollet porque no tengo ganas de verle pero creo que la he cagado... Tengo miedo Dani... miedo de perderle.-me dijo entre lágrimas y sollozos. Le dije que no se preocupara, que todo se solucionaría. La abracé con todo mi cariño y olí su pelo. Me sentía mal... ¿Cómo podía pensar en besarla y no parar de desearla mientras ella estaba sufriendo?