-Lara...-dije acariciándole la mano mientras lloraba. Me la apartó de un golpe. Me hizo daño en el pecho pero no dije nada.
-¡Déjame!! ¡Déjame en paz!! ¡No me toques!! Eres un puto egoísta. Sólo piensas en t-ti...-dijo llorando desesperadamente. En ese momento no sabía qué hacer, qué decir. Así que decidí mantenerme en silencio para que ella se desahogara conmigo.
-¿Y quién coño es esa chica eh?? ¡Quién!! ¡Seguro que es una guarra y sólo te has enamorado de ella por su cuerpo!!-dijo mirándome con rencor y con rabia. Si supiese que la chica es Anna... no sé qué me hubiera dicho.
-Mira, no te quiero ver más. ¡Vete de mi casa! ¡Vete!!!-dijo aún llorando. Me levanté y me fui. Me senté en las escaleras de su edificio apoyando mi espalda en la pared y entonces empecé a llorar. Necesitaba desahogarme yo también. No soporto hacer daño a una persona y menos si me quiere. Empecé a llorar como hacía mucho tiempo que no hacía. Me desahogué de toda la rabia contenida, de todos los nervios que había pasado últimamente y del horroroso sentimiento de culpa.
Estuve media hora sentado en la escalera. Después me levanté y me fui a casa. Nada más llegar fui al baño y me miré en el espejo. Dios mío, hacía tiempo que no me veía así. Tenía toda la cara roja e hinchada del esfuerzo que había hecho al llorar. Tenía los ojos aún húmedos y rojos. Me lavé la cara, me puse el pijama y me tumbé en la cama. Recuerdo que ni cené, no me entraba nada. Estaba muy relajado de tanto llorar y me sentía mejor. Cerré los ojos y me dormí en tres segundos.
El día siguiente me levanté muy relajado. Había dormido de un tirón y entraba mucho sol por la ventana de la habitación. Me duché y desayuné. Al acabar, cogí el coche y me fui al programa. Me encerré en mi camerino porque Anna aún no había llegado. Me senté en el sofá y me puse a leer el guión. Después de 20 minutos llegó Anna. Entró en mi camerino y se quedó parada a la puerta. La miré y vi que me estaba mirando a los ojos.
-Hola Dani.-me dijo sin saber qué cara poner.
-Ven.-le dije. Se acercó a mi y se sentó a mi lado. Me puso la mano en el muslo y me miró.
-¿Se lo dijiste?-me preguntó.
-Si. Lo pasé fatal Anna...-le dije mirándole seriamente. Nada más decírselo me abrazó y yo respondí. Me besó en la mejilla y me acarició el pelo con la mano.
-Lo sé.-me susurró. ¿Lo sabía? En ese momento me acordé de los días que fui a su casa porque estaba mal con Miki también llorando desesperadamente. Ahora la entendía y ella a mi. Habíamos pasado por lo mismo por poder estar juntos. Y ahora lo habíamos conseguido. Me separé de ella y la miré.
-Eh, pero ahora estamos juntos. Y estoy muy feliz. Los dos lo hemos pasado mal pero ahora ya es pasado. Me encantas Anna y quiero estar contigo.-le dije y me acerqué a ella. Ella también se acercó y nos besamos. Ese beso, fue precioso. Lo necesitaba. Necesitaba su cariño y volver a probar sus labios. Era como una medicina para mi. Estuvimos más de un minuto besándonos y acariciándonos hasta que acabamos en otro abrazo.
-Yo también Dani, yo también.
Ooooooooooooooooooooooooooooooooooooooohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh qq cuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuquiiiiiiiiiiiiiiiii!!!! jaajjaaja mas antes de mañana plis! yo a lo mejor scribo otro!
ResponEliminasisisi escribeee! Yo ya terminé que hoy he colgado muchos y estoy cansada!! jiji
ResponElimina