dimarts, 2 d’agost del 2011

Capítulo 38: ¿Rechazo mutuo?

Decidí no seguirla para que se quedara con las ganas, como acababa de hacer conmigo... Me fui a mi camerino y repasé el guión dejando la puerta abierta. Vi que pasó por delante de mi camerino, me miró y me sonrió. Yo la miré e hice como si no la hubiera visto. Seguí con mi guión. Entonces se puso a reír.
-Jajaja qué tonto eres...-dijo.-quieres fingir que pasas de mi... pues muy bien jajaja.
Tenía razón. Me moría de ganas de correr hacia ella y besarla pero no lo hice. También me reí y seguí leyendo el guión. Al ver que no le hacía caso entró en su camerino. Estuve todo el rato en mi camerino hasta que llegó la hora de comer. Bajé al comedor y vi que ella ya había llegado; estaba sentada, ya comiendo y no me miraba. Me dio rabia pero sabía que lo hacía para fastidiarme... En fin, habrá que aguantar, me dije. Yo también me senté, hoy lejos de ella y al acabar de comer me fui a vestir. No coincidimos en maquillaje porque cuando me tocó a mi ella aún se estaba vistiendo, ese día le habían puesto un corsé. Genial, para hacérmelo pasar peor, seguro que lo habrá escogido ella, pensé. La esperé como siempre en la entrada del plató hasta que vino igual de seria.
-¿Lo has hecho para joderme, verdad?-le dije medio sonriendo señalando su corsé.
-Jajaja pues no. El corsé lo ha elegido mi estilista...
-Ya, ya...-dije acercándome a sus labios.-pues te queda perfecto...
A medida que iba acercándome a ella se ponía más tensa.
-¿A-ah s-si?-dijo mirando mis labios. Entonces me quería separar pero no lo hice a tiempo y me besó cogiéndome la cara para que yo no me soltase. Yo respondí, (como no) y la agarré de la cintura.
-Cómo me haces sufrir...-le dije.
-Bah, "exagerao"...-me dijo sonriendo.
Entonces preparamos la entradilla y empezó el programa. Estuvimos muy bien y le dije unos cuantos piropos durante ese programa. Ella se sonrojó un poco y me miró sonriendo.
Al acabar entré en su camerino. La rodeé con mis brazos sin dejarla salir. Me miró e intentó escabullirse. No pudo y se rindió.
-¿Qué quieres?-me dijo con una media sonrisa.
-Ya lo sabes...-le dije acercándome a su cara.
-Hoy no... no puedo.-me dijo acariciándome los labios con su dedo índice.
-Vale, pero mañana no te me escapas.-le dije y en ese momento de debilidad consiguió salir de mis brazos y se fue casi corriendo de su camerino. Salí después de ella pero ya no estaba. ¿Así que siempre se sale con la suya? Pues esto no acabará así... pensé y empecé a correr para atraparla. No estaba en ningún sitio así que me imaginé que había salido fuera. Bajé las escaleras corriendo, casi me mato, y me encontré a Flo por el camino. Me paró.
-Dani tío, ¿dónde vas con tanta prisa?-me dijo mirándome a los ojos.
-Flo, ahora no puedo contártelo, es una tontería...-le dije volviendo a correr. Me estaba cansando, no suelo correr tanto... Si que corro pero es que ¡iba a la velocidad de la luz! Quería que Anna me viera antes de marcharse y que se arrepintiera de haberse ido. No sabía qué hacer pero quería verla. Al final la encontré. Estaba a punto de entrar en su taxi. Aún me faltaban muchos metros para alcanzarla. Empecé a hacer mi último spring.
Anna! ¡Espera!-conseguí decir, casi me quedo sin respiración...

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