Capítulo 65: Menos mal...

El resto del sábado lo pasé en casa. No tenía muchas ganas de salir y tampoco tenía dónde ir así que me quedé en casa. Antes no tenía nada de malo quedarse en casa, viendo la tele tumbado en el sofá con unas palomitas y una buena peli, pero en ese momento se me hacía casi insoportable. Al estar encerrado todo el día no podía pensar en otra cosa que no fuera en Anna. No tenía a nada que me distrajera, sólo pensaba en ella. Mientras comía, mientras veía la tele, mientras me hacía la cama...

Eran las ocho de la tarde. Estaba sentado en una silla del balcón con el móvil en la mano. Quiero llamarla. Tengo ganas de hablar con ella y de saber si aún sigue enfadada conmigo o si me he estado rallando para nada. Pero me da miedo... y si no me lo coge? Y si aún sigue enfadada y me grita?... eso no lo soportaría. Pero, ahora mismo, me da igual, necesito oír su voz, pensé. Así que la busqué en la agenda del móvil. No me costó encontrarla, era la primera de la lista. La primera de todas, como si fuera la más importante. Y lo era. Entonces puse mi dedo encima de su nombre y la llamé. Me coloqué el móvil en la oreja y no pensé en nada.

-¿Si?-contestó. No sé por qué pregunta si ya sabe quien soy...

-Hola Anna, soy yo.-le dije.

-Hola Dani.-su tono de voz no era muy serio. La veía más alegre. Espero que el ambiente familiar de Mollet la haya relajado y se le haya pasado un poco el enfado...

-¿Cómo estás cuqui?-le pregunté.

-Bien. ¿Y tu, qué haces?

-Pensar en ti... Tengo ganas de verte. Siento mucho lo de ayer, le he estado dando muchas vueltas y te vuelvo a pedir perdón, sé que te fallé.-le dije.

-Dani, sé que a lo mejor me pasé un poco. Pero es la reacción que me salió en ese momento. Me molestó mucho porque aunque no los conozca muy bien, sé cómo son tus amigos y sé que se lo pueden contar a alguien... y eso es lo que no quiero.-me dijo. Estaba tranquila, no la veía enfadada como el día anterior y yo también me tranquilicé al oír sus palabras.

-Ya lo sé. Ayer hablé con ellos y les volví a recordar que no se lo dijeran a nadie... Espero que así sea. Pero no quiero que estés enfadada conmigo.-le dije.

-No estoy enfadada contigo, pero sigo un poco rallada...

-¿Por qué?-le pregunté extrañado.

-Pues... prefería contártelo el lunes para no pensar más en ello este fin de semana pero ya que me has llamado... Esta mañana Miki me ha vuelto a llamar. Esta vez me ha llamado al móvil y no sabía si cogerlo... Al final no se lo cogí pero me sentí mal... No me gusta ser mala con la gente Dani, sé que se lo merece pero nunca he hecho esto...-la notaba preocupada. Le preocupaba de verdad el tema con Miki y a mi me molestaba cada día más.

-Annita, es lo mejor que podías hacer. Lo siento, no me gusta que estés mal pero él te hubiera dicho lo mismo que el otro día y no soporto que te pida que vuelvas con él... Eres mi novia Anna y ahora estás conmigo...-le dije.

-Lo sé, tienes razón. Bueno, el lunes hablamos ¿vale? Me tengo que ir...-me dijo.

-Vale, adiós, te quiero cari.-le dije.

-Y yo a ti.-me dijo y colgó.

Menos mal, pensé. Joder, Miki no para de hacerle la vida imposible... ¿No la puede dejar en paz de una vez? Si fuera por mi, le daría una patada en la boca con muchas ganas, lo juro. Para que se callara ya. Estoy harto de él, todo el día metiéndose en nuestra relación. Sé que no sabe que estoy saliendo con Anna y por eso quiero que lo sepa. Para que deje de rallarla a ella. No soporto que Anna se sienta mal por culpa de ese imbécil... Y mira que Miki me cae bien pero no puedo evitar cabrearme cuando se mete con mi novia. Porque ahora Anna es mía.Y está mejor conmigo así que eso es lo único que me importa ahora. No podía estar un segundo más sin oír su voz. Cómo la quiero...