divendres, 19 d’agost del 2011

Capítulo 79: Contención

Eran las seis de la madrugada. Nuestros cuerpos aún permanecían desnudos. Yo estaba tumbado, mirando al techo y Anna estaba durmiendo junto a mi. Con su cara pegada a mi cuello y su pierna derecha entrelazada con las mías. Tenía su mano sobre mi pecho. Al notar su respiración en mi cuello no quise dormirme. Quería estar así toda mi vida. Habíamos acabado los dos muy cansados pero con mucha satisfacción. Acabábamos de sentir mucho placer y en ese momento estábamos muy relajados. Fue en ese instante, cuando miré por la ventana des de la cama. Anna había dejado la persiana subida y entraba luz. Pero no me molestaba. Giré un poco la cabeza y le di un beso en la nariz. No se movió, seguía dormida. Sonreí al observarla y volví a tumbar la cabeza. Cerré los ojos y me dormí.

Me acababa de despertar por culpa del despertador. Anna se acababa de mover ligeramente y lo había apagado. Yo la estaba mirando. Se giró hacia mi y me vio observándola. Sonrió y se acercó a mi volviendo a la posición en que estábamos. Me besó el cuello suavemente y volvió a cerrar los ojos. Le acaricié el contorno de su cuerpo para que no se durmiera y me giré de lado hacia ella. Seguía con los ojos cerrados. Yo me reí y le di un pico. Al hacerlo, abrió los ojos y se quedó mirándome.
-Buenos días.-le susurré con una sonrisa. Me respondió con otra sonrisa y la abracé dándole un beso en la mejilla. Ella me acarició la espalda y me respondió al beso.
-Buenos días.-me susurró. Me separé de ella y me senté en el borde de la cama para ponerme la ropa interior. Una vez puesta giré la cabeza hacia ella. Aún seguía en la cama, tapada por las sábanas y observando mi cuerpo seriamente.
-Vamos, levántate.-le dije riendo. Se rió estirándose. Me levanté y fui al baño. Cuando salí Anna estaba entrando en la cocina. Se había puesto su ropa interior negra a conjunto e iba descalza. Al verla no pude resistirme a correr hacia la cocina y abrazarla por detrás. Se rió mientras le besaba el cuello. La giré y la agarré por delante.
-¿No me vas a dar el beso de buenos días?-le dije inclinando la cabeza. Sonrió y se acercó a mi dándome un tierno beso en los labios.-Esto no es un beso ni es nada...
-¿Ah no?-me dijo inclinando esta vez ella la cabeza.
-No.-dije moviendo la cabeza.
-Entonces, ¿qué es?-me dijo. Me acerqué a sus labios y le di un beso en la boca muy pasional.
-Esto es un beso!-se rió y yo también.
-Anda tira...-me dijo. Y me fui a su habitación. Me puse la misma ropa que llevaba ayer, no tenía más. Después, desayunamos juntos en la cocina mientras nos sonreíamos al recordar la noche que habíamos pasado. Al acabar, fuimos al programa en coche. Yo bajé una calle antes y llegué andando después de ella para que nadie nos viera entrar juntos. Me metí en mi camerino y, cinco minutos más tarde, entré en el suyo. La volví a abrazar por detrás.
-Jajaj Dani...-dijo acariciándome las manos.
-Eh, no me rechaces ahora...-le dije poniendo voz de niño pequeño. Se giró de cara a mi.
-Jaja, sabes que aquí no podemos hacer esto...-me dijo intentando ponerse seria.
-¿Esto?-le dije dándole un beso recorriendo todas las partes de su boca. Ella me respondió. Acabé de besarla y la miré a los ojos. Estaba sonriendo tímidamente.
-Si, esto. Así que vete a tu camerino antes de que vayamos a más...-dijo.
-Jajaja, está bien... Chao cuqui.-le dije dándole un pico y me fui. Estaba sentado en mi sofá, repasando el guión pero sólo tenía ganas de volver a su camerino para estar con ella... Qué feliz estoy. Esta contención nos acabará haciendo daño...

2 comentaris:

  1. Ooooh que bonito! Me encanta la última frase de Dani! Siguiente!

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  2. Jo!!!! q suerte tienen algunas... ;) me ha encantado! q tierno! ;)

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